Por ahí se ha escuchado siempre: "No nos llame, nosotros le llamamos"
Pero que difícil es aplicárselo a uno mismo...
normalmente caemos en la mal llamada "ilusión" nos dejamos arrastrar por miradas, por falsas sonrisas, y por muestras de cariño... que no son mas que el escape desesperado de situaciones - que no nos competen- y que por accidente llegan a nuestras vidas.
me cuestiono ahora ¿ será acaso que quienes realmente estamos mal somos quienes nos dejamos llevar por esas insípidas emociones? quizá sí y eso es grave...
¿ cómo es posible que creemos cuanta farsa se nos pone en frente por tener corazón de azúcar? (aunque no parezca)
... nos dedicamos a buscar intensamente aquello que probablemente no vamos a encontrar o que en el peor de los casos lo tenemos a tres dedos de frente...
Esa frase vulgar de "esperar es sano" que por mí se vaya hoy al carajo (y que se lleve consigo este saco de decepción que me provocó sus mentiras).
Por ahí también se habla que en la vida se da una de cal por otra de arena ... y es cierto.
Después de pasar por el proceso más detestable de contradicción emocional, caí de pronto en otro (más agradable obvio) que a la larga no es más que una copia al carbón de lo mismo que yo sufro. Sé que me entiende, sabe lo que se siente, sabe lo que es sentirse solo rodeado de mucha gente y aún así sonreír... Sé que sabe todas esas cosas pero no las comprende... aún así es maravilloso saber que no sólo yo estoy loca...
He llegado a la mejor conclusión: estoy deacuerdo a no llamar... "no nos llame, nosotros le llamamos", pero cuando me llame...
Lo siento has llamado demasiado tarde...
Y es así como en este recorrido desesperado por falacias, emociones y desencantos, resulto nuevamente afectada: si me gustaban las mentiras con sabor a chocolate y ya las probé... ahora me gustan de nuevo pero no reconozco su sabor. No puedo dejarme llevar de vuelta, después de todo uno siempre tiene que hacer : ¡ lo que le ronca ! (y eso me encanta )
y para ser muy honesta soy una muñeca de porcelana y me han borrado el corazón que me habían dibujado en el pecho... ahora la pregunta es ¿realmente quiero un lápiz que lo dibuje de nuevo? o ¿ será mejor ya no tener corazón?
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